La actividad deportiva genera un esfuerzo o uso excesivo de un grupo de músculos, que pueden originar síntomas como inflamación o dolor después del ejercicio. Como consecuencia de este esfuerzo repetitivo, intenso o incorrecto pueden producirse diversas lesiones tendinosas, ligamentosas o musculares.
Es por esto que el tratamiento con ozonoterapia ha sido el complemento perfecto por su alta eficacia para tratamiento de lesiones y para mejorar la performance deportiva, sin efectos secundarios:
Efecto antiinflamatorio y analgésico, generando alivio al dolor e inflamación, sin efectos secundarios o metabolitos tóxicos.
Incremento de oxígeno en los tejidos: El ozono permite aumentar la capacidad de la sangre para absorber y transportar mayor cantidad de oxígeno a todo el organismo, mejorando la circulación y las funciones celulares en general.
Mejora la circulación sanguínea: Aumenta la elasticidad de los glóbulos rojos, que pueden circular por vasos sanguíneos más finos y llevar oxígeno y nutrientes a lugares de difícil acceso.
Repara contracturas musculares: Aplicando ozono local en las zonas de la lesión, mejoramos irrigación sanguínea, dolor e inflamación en menor tiempo.
Previene lesiones: En músculos más oxigenados y menos tensos, el porcentaje de sufrir alguna lesión se reduce drásticamente.
Retarda procesos degenerativos: El progresivo desgaste de las articulaciones durante el ejercicio puede producir lesiones degenerativas. El ozono disminuye el exceso de radicales libres por su efecto antioxidante, ayudando a prevenir lesiones.
Acorta los periodos de recuperación y optimiza los tratamientos habituales.
Modula el sistema inmunológico, mejorando sistema de defensas contra enfermedades, manteniendo así el rendimiento del deportista.